Mientras la clase media subsidia los autos a los ricos, Nissan cierra y peligran 1050 puestos de trabajo

Así es, mientras la bazofia libertaria que nos (des)gobierna, continúa reduciendo impuestos a los ricos y haciéndoles pagar el saqueo en base a bicicleta financiera y el robo del oro (nuestro, de todos los argentinos trabajadores) a la clase media baja que se cree clase media, Nissan Argentina se va del país y deja a 600 trabajadores colgados del pincel.

Pero mientras tanto, el fanático menemista, admirador del comunista, hace un show en su 6, 7 y 8 personal junto al operador político Trebuq (ambos deben terminar presos juntos a todos sus «amigos»), diciendo payasadas tan bobas e incongruentes, que daría días de carcajadas sino fuera porque el cargo que (mal)ocupa, como que «Primero que nada, quiero dejar en claro que no somos un gobierno fascista. Si fuéramos un gobierno fascista, no habría una marcha de este estilo. Hay que recordar también que nazi viene de nacional socialismo… Vamos muchachos, háganse cargo. Eran de los de ustedes, eran de izquierda» y que «La Provincia (de Buenos Aires) tiene 240 centros de hormonización. A mí me parece un horror. Te parece que una criatura, un menor, esté en condiciones de saber… Yo no sé lo que piensa la gente. Desde mi punto de vista que le amputen los genitales a una criatura mientras le llenan la cabeza que es otra cosa distinta de lo que dice su biología… Eso de separar el género de la biología no es gratis».-

Si bien, sabemos que esto es solo para la gilada y desviar la atención de un análisis real, como de que Nissan Argentina cierra, lo que repercutió en Maxion Montich, autopartista de más de 65 años que fabrica los chasis de la Nissan Frontier y Renault Alaskan, que ya se presentó en «Procedimiento Preventivo de Crisis», lo que sumaría ―de seguro― 450 empleados en la calle que la autopartista tiene de manera exclusiva para la fabricación de los mencionados chasis sobre un total de 900.

Pero bueno, la clase media baja que se cree clase media, puede festejar ahora que el Ford Mustang V8 bajó su precio de $121.500.000.- a $97.200.000.-, mientras que su acceso a la gama, el Ford Territory no modificó valores y continúa en $43.093.600.-

Toyota, por su parte, siempre amiga de una Argentina productiva, bajo los precios de la SW4 de $80.879.000.- a $70.769.000.- y de la Hilux SRX 4×4, de $68.747.000 a $66.685.000.-, pero subió el precio de su entrada de gama, el Yaris XS $23.400.000.- a $24.000.000.-, al igual que el Corolla, con subas promedios de entre 2 y 3 millones de pesos según versión.

Honda, no se quiso quedar atrás, y dejó clavado el precio de su entrada de gama, la HR-V LX en $38.700.000.-, pero CR-V paso de $59.720.000.- a $56.500.000.-, el CIVIC de $74.722.500.- a $65.488.500.-

La «afuera» Nissan aumentó los precios de sus entradas de gama de Versa, Sentra, Kicks y Frontier, pero redujo, por ejemplo, el de la X-TRAIL, que paso de $74.959.400.- en su versión Exclusive a $62.500.000.-

Y sí, lo sabemos, muchos dirán que las automotrices reaccionan directamente a la reducción de Impuestos, pero la realidad es que si quisieran podrían compensar, es decir, le bajamos un 6% a un alta gama y un 2% a un entrada de gama, a efectos de beneficiar a sus clientes «más ajustados», que a la vez son los que más pagan, porque mucha clase media baja argentina, que se cree clase media, accede al 0km a través de los famosos y estafatorios «planes de ahorro», en el cual, al final del ciclo, la víctima (cliente), termina abonando el valor de 3 o más 0km.

Pero estas medidas solo dejan en clara evidencia, a quienes beneficia directamente y a través del Estado, la bazofia libertaria que nos (des)gobierna. Mientras tantos los alimentos continúan pagando IVA, mientras tanto el salario es «ganancias», mientras tanto, los que tendrían que estar llevando a cabo el juicio político a todos y cada uno de estos léperos de guantes blancos… Duermen la siesta, bajo la seguridad que brinda un bolsillo abultado…