Nunca entenderemos porque existen seres humanos tan poco humanos y, por sobre toda las cosas, con tanta falta de amor propio; porque esa es la única razón para ser tan rastrero y arrastrado.
Los argentinos de bien, los trabajadores dignos de la clase media, queremos una Argentina digna, soberana, libre e independiente, libre de los Estados Unidos pero también libre de China y/o Rusia, mantener buenas relaciones amistosas y comerciales no es sinónimo de sumisión… Solo un cobarde se arrodilla; queremos una Argentina que nos permita a todos, cumplir nuestros sueños, normalizar (y asumir) que es ser clase media. Porque uno de los problemas que tenemos, es que la gran mayoría somos clase media baja y no lo queremos reconocer. Basta un gobierno de mierda para darte cuenta que estabas agarrado con las uñas a una falsa denominación.
Argentina puede brindar un nivel de vida para todos sus habitantes como Noruega, tenemos todos los recursos, todos los climas, todas las facilidades, lo único que debemos de sacrificar son a 540 personas (seguramente cuando se profundice en las investigaciones serán por encima de las 1000, el 0,002% de la población), todos léperos de guantes blancos que desde hace más de 50 años que viven de robarnos…
Pero también debemos de comprender que el futuro de nuestro país depende mucho más de nosotros de lo que creemos, de nuestra participación social, de involucrarnos, de ir a sacar a patadas a todos estos delincuentes; porque está más que claro que la corrupción está tan normalizada en el ambiente, que quienes presentar un proyecto hoy, votan en contra de su propio proyecto mañana y no pasa nada. Que una bazofia libertaria estafa a través de una criptomoneda a miles de personas y no pasa nada. Que el ludópata serial, adorador del «libre mercado», interviene con la guita del ANSES en el mismo para poder publicar en sus medios afines que «el mercado» seguía confiando en ellos a pesar del escandalo $LIBRA y no pasa nada…
Creemos que se debe de empezar a luchar en cada sector; a exigir la renuncia de todos los representantes, a entender que, quienes queremos una Argentina como la mencionada, no lo lograremos si seguimos permitiendo el ingreso a la política a todos estos léperos de guantes blancos; también debemos de anexar a la Justicia, ¿la hora de la purga?